Seguidores

martes, 3 de abril de 2012

(la prueba) tighten up

El sistema en el que vivo es maquiavélico. Llevo un tiempo negándome a pagar por lo que parece que es "normal". Me refiero a pagar, por ejemplo, diez euros por una copa en la garrafonesca noche madrileña. Estoy harto de pagar cantidades astrales por productos no ya terrenales sino artificiales. Recuerdo que mi primera reacción en este sentido fue cuando mi ex-mujer me propuso comprar una casa por 240.000 euros. Aún está grabada mi respuesta en el techo de mi coche:
- Por principios nunca pagaré tanto dinero por una casa (Vivía en una ciudad extremeña) ¿Por qué tenemos que hacer rico a alguien mientras nosotros nos privamos de una vida mejor? Es más ¿Para qué una casa más grande si tenemos un piso de tres habitaciones de las cuáles usamos una y media?

Pero he aquí que el sistema, tan listo él, ayer volvió a ponerme a prueba. Hace poco no fui a un concierto de Señor Chinarro porque el precio de la entrada era 22 euros y me negué a pagarlos por principios. ¿Alguién piensa que Señor Chinarro se habría atrevido a cobrar 3700 pesetas por un concierto? Sin embargo, ayer el sistema pretendió convertirme en héroe homérico. The black keys actuarán en Madrid en noviembre. Precio de las entradas: de 32 a 46 euros. ¡Cómo! Llevo meses esperando este concierto pero a ese precio. En el BBK live podría ver a Radiohead, The cure, Vetusta Morla y un montón de buena música más por 105 euros...

Mi corazón me dice: Ni de coña pagaré 32 euros por dos americanos que van de guay.
Mi mente: The black keys, The black keys...



2 comentarios: